Ventana oscilobatiente con persiana ¿en aluminio o PVC?

Una ventana oscilobatiente con persiana es unas de las mejores opciones para aislar tu casa y garantizar a la vez la mejor ventilación. Gracias a la actual tecnología en carpintería de ventanas hay diferentes opciones para satisfacer las necesidades más específicas de cada cliente. 

Aluminio o PVC para tu ventana oscilobatiente con persiana

Una de las primeras decisiones que hay que tomar para disponer de una ventana nueva es escoger el material. Para las ventanas las dos opciones más comunes y ventajosas son el aluminio y el PVC. 

Ambos materiales, unidos a unos cristales de calidad, reúnen características específicas que garantizan aislamiento acústico y térmico, buena ventilación y una estética moderna

La elección de un material u otro está ligado a veces al precio. En principio el aluminio es más barato, pero al tener que incorporar el sistema de rotura de puente térmico para mejorar el aislamiento, su precio final se asemeja mucho al de una ventana de PVC.  

Aluminio, gran resistencia y durabilidad

Una de las ventajas del aluminio para una ventana oscilobatiente con persiana es su resistencia. El aluminio es muy duro, aguanta la intemperie y el uso diario sin estropearse ni ver mermadas sus prestaciones. 

Por otro lado, al ser un material resistente permite realizar diseños de todo tipo. Se pueden hacer ventanas de grandes dimensiones y también de tamaño reducido para adaptarse a todas las situaciones.

La durabilidad de las ventanas de aluminio está garantizada durante muchos años. Permanecen en perfecto estado y no precisan apenas mantenimiento, por lo que generan pocos gastos. 

En cuanto a la persiana, al ser de aluminio tiene poco peso y se maneja con facilidad, ya sea de modo manual o domotizada. 

PVC, un material de gran aislamiento 

Como hemos comentado antes, tanto una ventana oscilobatiente con persiana de aluminio como el PVC garantizan un óptimo aislamiento térmico y acústico. Pero cabe destacar que las esquinas de las ventanas de  PVC están selladas térmicamente (no pegadas) y esto las convierte en una de las mejores opciones de aislamiento del mercado

Además, hay que recordar que el PVC es un material 100% reciclable y está libre de metales pesados como el plomo, por lo que es una elección sostenible.