Las terrazas son una vía de escape en un piso, pero en época de frío se convierten en un espacio desaprovechado. Una manera sencilla de sacar partido a esta zona es instalar una cortina de cristal en tu terraza.
Esta solución es la versión más moderna del típico cerramiento que vemos por las calles de todas las ciudades.
Hermeticidad asegurada con una cortina de cristal para tu terraza
La tecnología e innovación en el sector de la carpintería de aluminio permite realizar soluciones de alta eficiencia con las actuales cortinas de cristal. No hay que olvidar que el objetivo de una cortina de cristal en una terraza es conseguir el máximo aislamiento del frío sin perder visibilidad y manteniendo siempre la opción de apertura en épocas de calor.
Para ello, las cortinas de cristal se realizan con vidrios de alta calidad, con un grosor que garantice el aislamiento del exterior y con un sistema de unión y sellado entre los diferentes tramos que garantice la hermeticidad.
Para no perder visibilidad los actuales diseños se realizan con perfiles y marcos finos de aluminio. También existen opciones de instalar una cortina de cristal sin marco de aluminio, con acabados en goma que sellan los bordes superiores e inferiores para evitar fugas y entradas de aire.
Con este sistema de cerramiento la terraza se convierte en un espacio habitable más de la casa durante el invierno. Un mirador estupendo para relajarse después de trabajar o una sala extra donde comer los fines de semana.
Eficiencia energética
Otra de las ventajas que se disfrutan con una cortina de cristal de una terraza es la mejora de la eficiencia energética. El cerramiento contribuye en gran medida a aislar la vivienda y, por tanto, a reducir el consumo de energía y bajar el gasto en las facturas de gas y electricidad.
Una habitación con vistas en invierno
La cortina de cristal, como hemos señalado antes, nos ayuda a aprovechar la terraza durante los meses fríos. Se convierte en una habitación con vistas. Una zona de gran visibilidad y punto de entrada de luz natural para el resto de la casa.
Y en verano, abierta
Además, esta solución para terrazas permite abrir estas cortinas en verano y disfrutar del aire libre.
Dependiendo de los modelos las cortinas pueden ser correderas o plegables. Este último modelo es el más práctico, porque permite dejar las cortinas recogidas en un lateral y disponer de la amplitud total del balcón.