Unas ventanas de buena calidad y bien instaladas pueden suponer un ahorro de hasta el 70% en la factura de electricidad o gas. Un complemento perfecto que ayuda a alcanzar o incluso superar este porcentaje son las persianas de ventanas de aluminio. Descubramos qué más ventajas aportan y cómo deben ser.
Más aislamiento con persianas de ventanas de aluminio
Mientras que en los países al norte de los Pirineos las persianas no son demasiado comunes, en España las vemos como un elemento más que se incluye de serie en la ventana. Pero lo cierto es que son una pieza extra que desempeña un papel importante.
La actual carpintería de aluminio cuenta con las últimas tecnologías destinadas a mejorar las prestaciones térmicas y acústicas de las ventanas y balconeras. El sistema de rotura de puente térmico se incluye en casi todas las composiciones con el objetivo de eliminar el contacto entre la cara interior y exterior y minimizar el traspaso de temperaturas.
Solo con estos componentes, tenemos una ventana de excelente calidad, pero al incorporar una persiana de aluminio incrementamos la capacidad de aislamiento.
Ventajas de bajar la persiana
La persiana actúa como una barrera más que frena el paso del frío o del calor del exterior y también como una pantalla para bajar los decibelios en el interior de la habitación. De hecho se calcula que una ventana de aluminio con persiana puede ayudar a reducir el ruido hasta en un 97%.
Para un correcto funcionamiento las persianas de ventanas de aluminio tienen que estar bien ensambladas y contar con una cinta de calidad que esté bien sujeta al tambor. También es importante disponer de un buen sistema de retención y recogedor para que la persiana quede en la posición que deseamos.
Y cuando vayas a encargar la ventana recuerda que puedes cambiar de posición la cinta, habitualmente está a la derecha, pero puedes pedir que la coloquen a la izquierda.