Características de las ventanas de aluminio oscilobatientes

Uno de los modelos de ventanas más empleados en viviendas y edificios públicos son las ventanas de aluminio oscilobatientes. Los motivos de esta alta demanda pueden resumirse en:

  • Alto grado de aislamiento térmico y acústico
  • Buenas opciones de ventilación natural
  • Poco mantenimiento
ventanas de aluminio oscilobatientes

Eficiencia energética y comodidad con ventanas de aluminio oscilobatientes

Por las propiedades del aluminio y las características de toda la combinación las ventanas de aluminio oscilobatientes proporcionan un alto grado de aislamiento y contribuyen a crear un ambiente interior cómodo y agradable. 

El aluminio es un material conductor, pero gracias al sistema de rotura de puente térmico se consigue un óptimo aislamiento tanto térmico como acústico. La rotura del puente térmico evita que la cara exterior e interior entren en contacto gracias a introducir entre medias un mal conductor que suele ser un perfil separador de plástico que se incrusta en el perfil de aluminio. 

Estas varillas de poliamida de 6.6 y reforzadas con un 25% de fibra de vidrio consiguen aislar el interior y contribuir a una mayor eficiencia energética. Eficiencia que puede llegar a suponer un ahorro de hasta el 70% en la factura de la luz y el gas. 

Ambiente saludable con tus ventanas de aluminio oscilobatientes 

Otro de los atractivos de las ventanas de aluminio oscilobatientes es que están diseñadas para permitir una apertura de dos formas: en vertical y en horizontal. El sistema oscilobatiente quiere decir que la ventana consta de un sistema de ejes que hace que se pueda abrir la hoja de la ventana de manera vertical y también de manera horizontal. De esta última forma queda una apertura de entre 45 y 180 º que deja entrar el aire exterior sin que haya problemas de entrada de lluvia ni de intrusos. 

Así se garantiza una correcta ventilación natural y un aire interior mucho más sano. 

Poco mantenimiento

Por último cabe destacar que el aluminio es muy resistente que no sufre con los cambios de temperatura ni la lluvia ni el sol. De este modo permanece en perfecto estado durante muchos años.

Esto significa también que requiere poco mantenimiento. Solo es necesario limpiar de manera periódica con agua y jabón los perfiles, las juntas y los cierres para su correcto funcionamiento.