Cuando se trata de elegir ventanas para nuestro hogar, una de las decisiones más importantes es la elección del material. Las dos opciones más comunes son el aluminio y el PVC, y ambas tienen ventajas y desventajas. Para tomar una mejor decisión, analizaremos en detalle cada uno de los materiales para ayudarte a escoger qué ventanas poner, aluminio o PVC.
¿Qué ventanas poner, de aluminio o de PVC?
Lo cierto es que ambas opciones proporcionan ventanas de alto rendimiento y gran durabilidad. Vamos a ver en detalle las características de cada opción para decir qué ventanas poner, aluminio o PVC.
- Aluminio
Las ventanas de aluminio son una opción con mucha tradición en el mundo de la construcción y las reformas. El motivo está relacionado con su durabilidad y resistencia. Estas ventanas son resistentes al fuego, a la humedad y a la corrosión, lo que las hace ideales para su uso en exteriores. Además, el aluminio es un material ligero, lo que significa que las ventanas de aluminio pueden ser más delgadas y permitir que entre más luz natural. Otra ventaja de las ventanas de aluminio es que son fáciles de mantener y limpiar, un simple paño humedecido basta para tenerlas perfectas.
Sin embargo, las ventanas de aluminio tienen algunas desventajas. Una de las principales es que el aluminio es un conductor térmico, lo que significa que pueden ser menos eficientes energéticamente. Esto se debe a que el aluminio permite que el calor y el frío entren y salgan fácilmente, lo que puede afectar la temperatura del hogar. Para solucionar esto basta con incorporar un sistema de rotura de puente térmico que resulta de alta eficiencia. Las ventanas de aluminio también pueden ser más costosas que otras opciones, como el PVC.
- PVC
En cuanto a las ventanas de PVC cabe destacar que están hechas de un material plástico resistente y duradero. Estas ventanas son resistentes a la humedad, a la corrosión y a la decoloración, lo que significa que durarán mucho tiempo. Además, el PVC es un buen aislante térmico, lo que significa que puede ayudar a reducir la cantidad de energía necesaria para calentar o enfriar un hogar.
Otra ventaja de las ventanas de PVC es que suelen ser más asequibles que las ventanas de aluminio. Además, el PVC es fácil de mantener y limpiar, lo que significa que no se necesitan productos especiales o costosos para mantenerlas en buen estado.
Asimismo, las ventanas de PVC también tienen algunas desventajas. Una de las principales es que pueden ser menos resistentes a los impactos que las ventanas de aluminio. También son más gruesas que las ventanas de aluminio, lo que significa que permiten menos luz natural en el hogar.
Como ves, ambas opciones son plenamente válidas para crear una casa confortable y con buen grado de eficiencia energética. Al final, escoger una u otra opción es casi una cuestión personal. En cualquier caso, asegúrate de comparar precios y calidad antes de tomar una decisión final. Llámanos y te ayudamos.